Entrevistamos a uno de nuestros usuarios para que nos cuenta cómo vive en ella.
Hablar de residencias de Mayores aún provoca cierto reparo, tanto para el futuro residente como para sus familiares. Como cualquier persona que inicia una nueva etapa, puede acompañarnos la incertidumbre y son muy variadas las preguntas o inquietudes que podemos abordar a la hora de tomar la decisión de ingresar en una Residencia de Mayores.
Es por esto, que nuestro equipo técnico de la Residencia de Mayores de Mombeltrán ha querido acercar el día a día de nuestro centro a través de una entrevista a uno de nuestros residentes.
Nuestro entrevistado se llama Juan, tiene 79 años, utiliza una silla de ruedas ya que físicamente no puede mantenerse de pie ni caminar debido a su patología. Eso no impide que Juan participe en todas las actividades de nuestro centro.
Entrevistador (E): Juan, cuéntenos qué hace cuando se despierta por la mañana.
Juan (J): Por las mañanas vienen a despertarme a las 8.30 aproximadamente, los auxiliares me ayudan a levantarme de la cama, que a estas edades cuesta más. Después como no puedo mantenerme de pie, me llevan al baño de mi habitación, donde me asean sentado en una silla que se puede mojar. Al principio me daba un poco vergüenza que me vieran en esa situación, pero los auxiliares son tan amables que me hacen sentirme como en casa. Cuando ya me han aseado y afeitado, me preguntan qué ropa quiero ponerme, me ayudan para vestirme y termino poniéndome mi colonia preferida. Después me llevan en mi silla de ruedas al comedor para desayunar a las 9.30
E: ¿Te encuentras cómodo en tu habitación?
J: Muy cómodo. A mi habitación suelo llamarla mi casa dentro de la Residencia, han dejado que la decore a mi gusto, tengo fotos de toda mi familia, libros con los que me entretengo antes de dormir y una televisión, eso si, hay un horario para no molestar a otros compañeros. Yo comparto habitación con Pedro, no lo conocía antes de llegar pero ya somos grandes amigos.
E: Después del desayuno, ¿qué suele hacer? ¿Hacéis muchas actividades?
J: Hacemos muchas cosas, no nos da tiempo a aburrirnos. Hay 4 chicos (terapeutas) en el centro que tienen infinidad de ideas para que podamos entretenernos. Cada uno hacemos una actividad dependiendo de lo que nos gusta. Todas las mañanas los terapeutas nos ponen al día con el periódico y después hacemos juegos para entrenar la mente, hay que estar muy concentrado porque nos hacen preguntas o realizamos tareas con números, palabras, crucigramas, cálculos, ¡cada día diferente! Todos los días bajamos a regar nuestro huerto, aunque voy en silla de ruedas, los terapeutas me han preparado una azada para que yo también pueda participar con mis compañeros. Trabajo no nos falta. Cuando terminamos viene la chica de la gimnasia (fisioterapeuta) y en grupo nos hace mover todo el cuerpo, ¡desde la cabeza hasta los pies! Con ella también entreno las piernas en las barras paralelas todos los días y a veces me masajea las cervicales porque me levanto con dolores en el cuello.
E: ¿Qué tal la comida?
J: Se come muy bien, se nota que es comida casera y muy parecida a lo que hemos comido toda la vida en casa. Los auxiliares siempre están pendientes por si hay algo que quiera repetir. He de confesar que me encantan los postres caseros, esos sí que los repetería! En los desayunos y las meriendas, el comedor parece un hotel, podemos elegir prácticamente de todo. Además, nos tienen en cuenta para hacer los menús, porque nos preguntan qué queremos que haya de comida o nuestros gustos en algunas reuniones que hacen al mes con nosotros.
E: ¿Qué sueles hacer en tus ratos libres?
J: No hay muchos! Pero sí tenemos algunos, por ejemplo, después de comer pido que me lleven a mi habitación para echarme la siesta hasta la hora de la merienda, otros compañeros se quedan en el salón viendo la televisión o jugando a las cartas. En algunos de estos ratos libres, los terapeutas me ponen al habla con mi familia que no puede venir a verme todas las semanas, y puedo verlos a través del teléfono!
E: ¿Por las tardes también hacéis actividades?
J: Depende del día, pero son muy entretenidas. Hay días que participamos en un taller de cocina y hacemos galletas, bizcochos o preparamos meriendas caseras, otros días hacemos concursos con juegos como encestar la canasta, bolos. También jugamos a concursos de antes como el “1, 2, 3”, a “El Precio Justo”, a “Pasapalabra” y todos los viernes jugamos al bingo y ganamos premios. También nos ponen películas, documentales y conciertos en una pantalla grande.
Los días que tengo visita, no puedo participar en ninguna actividad, ya que paso toda la tarde en el jardín con mi familia hablando y riendo. Tenemos la suerte de tener un jardín grande y con muy buenas vistas a la sierra de Gredos. A veces también salgo con mi familia a dar un paseo por Mombeltrán
E: Y ¿cómo finalizan ustedes el día?
J: Entramos a cenar a las 20.30. Cuando termina, los auxiliares me llevan a la habitación, me ayudan a desvestirme y a prepararme para dormir. Veo un rato la televisión o leo un libro de la biblioteca hasta que cojo el sueño.
E: La última pregunta Juan, ¿hacen ustedes actividades especiales o salen de la residencia a menudo?
J: Salimos de la residencia varias veces a la semana, por ejemplo, a la plaza del pueblo, al parque o al mercadillo que ponen todos los viernes. Esta semana sin ir más lejos, hemos ido a la piscina del pueblo. Hacemos hasta excursiones! Todos los meses además, tenemos actividades preparadas que nos encantan, cenas en el jardín, actuaciones de baile y cante de grupos del pueblo o cualquier celebración que tiene que ver con
fechas señaladas del año, como la Semana Santa o la Navidad, las fiestas del pueblo y también celebramos los cumpleaños de los compañeros a final de cada mes.
E: Muchas gracias Juan por compartir con nosotros su día a día en la Residencia.
J: Nada, lo que hace falta es que podamos seguir disfrutando siempre como hasta ahora, y que sigáis tan atentos conmigo. Sois muy cariñosos y me ayudáis mucho. Menos mal que hay sitios así!
